Star Wars en esencia

Uno de los tuits más memorables de los últimos meses decía algo así:"Querido JJ, como la cagues se te conocerá como Jar Jar Abrams". Puede estar tranquilo.

Rey conoce a BB-8   Foto:Lucasfilm/Disney

Antes de ver El despertar de la Fuerza, seas o no fanático,conviene hacer un simple ejercicio.Pregúntate qué es lo que te gustaría ver y lo que no, porque es exactamente lo que J.J. Abrams y Lawrence Kasdan (también Michael Ardnt) han hecho a la hora de coescribir el guión. Imaginaros por un instante el papelón. Retomar una historia más de 30 años después y con el precedente inmediato de una trilogía, los episodios 1 al 3 que, lejos de ganar con el tiempo, cada día tiene más detractores aunque en su día fueran un éxito incuestionable. Solo se me ocurre una equivalencia.Si Abba grabase ahora un nuevo álbum ¿qué sería más probable, el éxito o la decepción?.

El séptimo episodio de Star Wars tenía que funcionar en varios frentes simultáneamente.Por un lado, atraer y gustar literalmente a todo el mundo: fanáticos,desenganchados,indiferentes y a sus hijos/as. Por otro, colocar Star Wars en el mercado como la marca más rentable del showbusiness para que Disney empiece hacer caja tras invertir miles de millones de dólares y, no menos importante, servir de capítulo inicial de una trilogía en la que nos reencontremos con los personajes clásicos,conozcamos a los nuevos y que tenga entidad propia para que pueda entenderla alguien que no haya visto ninguna película de la saga. Casi nada.

Rey y Han Solo Foto: Disney/Lucasfilm

Dicho esto, El despertar de la Fuerza es un éxito sólo por ser superior a las tres películas que Lucas estrenó entre 1999 y 2005. Sus más de dos horas pasan volando. En un magistral ejercicio de síntesis, el ya icónico texto introductorio logra ponerte en situación para arrancar con fuerza, ir al grano y presentarte en media hora a los nuevos personajes principales: Rey (Daisy Ridley),Finn (John Boyega),Poe Dameron (Oscar Isaac),Kylo Ren (Adam Driver) y el robot BB-8. No quiero desvelar nada de la trama en esta primera crítica por lo que me voy a ceñir a los aspectos más técnicos. 

Abrams y su equipo de diseñadores recuperan la estética y, aún más importante, las texturas de las primeras películas,tangible, usada. Desierto,nieve,bosques, todo es real aunque haya retoques. El hecho de que Dan Mindel haya usado celuloide a la hora de filmar, más allá de gesto,guiño nostálgico o capricho, es una declaración de amor al rodaje cinematográfico, a que vayamos a ver una película y no un archivo digital, aunque al final sea eso lo que todos vemos. También es crucial el sonido,rugidos, motores, zumbidos que te trasladan a ese mundo con los ojos cerrados.

Clásico combate aéreo Disney/Lucasfilm

Como hizo Lucas en 1977, se han elegido rostros desconocidos para los personajes nuevos. Es muy fácil creértelos porque no les has visto, en su mayoría, en otros papeles.Rey es Rey y no la superestrella Daisy Ridley haciendo de Rey. El reparto en su conjunto funciona.Hay química entre ellos, traspasa la pantalla. Otra cosa es el retorno de los demás.Qué gozada es ver a Harrison Ford meterse en la piel de Han Solo. Porque él es Han Solo.Sus diálogos, gestos, intercambios con Chewbacca (Peter Mayhew) o las escenas junto a Carrie Fisher (Leia). Hay miradas que dicen mucho sin hablar. Star Wars vuelve a ser divertida, te ríes sin que insulten tu inteligencia.

Y quién mejor que John Williams para, a través de sus ya imperecederos temas y con los nuevos, tender los puentes entre lo que ya conocemos y lo que nos queda por conocer. No se puede describir con palabras la capacidad de este hombre para subrayar, enfatizar o simplemente apelar a tus emociones para que todo acabe por tener sentido, a pesar de que no haya grandes nuevas melodías para tararear a la salida del cine.

Ahora, no te engañes. El despertar de la Fuerza es el primer episodio de una nueva trilogía. Responde a algunas preguntas pero plantea otro montón. Líneas argumentales abiertas,personajes por desarrollar,fundamentalmente Rey,Poe Dameron,Kylo Ren o secundarios que pueden dar mucho juego.

Aquí es donde vienen los peros.

Lucas y Abrams en la premiere de
Londres

Entiendo el celo con el que se ha protegido la trama.Sin entrar en detalles,y a pesar de todo lo que he dicho, el argumento general bebe demasiado de La guerra de las galaxias. Mi gran miedo es haber perdido la capacidad de sorprender. Entre película y película de la trilogía original, Lucas pedía lo imposible a su equipo para ofrecernos algo nunca visto. Te preguntabas ¿cómo habrán hecho eso?. El escenario ahora es distinto. Ya estamos acostumbrados a unos acabados impecables, a rizar el rizo, por lo que solo nos queda el factor sorpresa. ¿Cómo dar golpes de efecto sin recurrir a giros ya usados tras siete películas?,¿hasta dónde se puede estirar la historia?.

En definitiva, El despertar de la Fuerza es un reconocimiento gozoso de lo mucho bueno creado por George Lucas, que ha hecho lo mejor que podía hacer. Ponerse a un lado y dejar que otra generación de cineastas continúen lo que él empezó, la pura esencia de Star Wars.