El consejero delegado de Walt Disney Company, Bob Iger, quien publicó el otro día el conocido selfie con Chewbacca del que se hizo eco en primicia este blog, ha confirmado una vez más que se está trabajando "al menos" en tres spinoffs ambientados en el universo Star Wars, sin dar más detalles.
En declaraciones recogidas por el especialista en espectáculos del Wall Street Journal, Ben Fritz, durante la presentación de resultados a los accionistas, Iger volvió a repetir que dichas películas se estrenarán entre los episodios 7,8 y 9. Es decir, si se cumplen los plazos el primero de ellos llegará a las pantallas a lo largo de 2016. De esta forma, Disney vuelve a dejar claro que su estrategia con respecto a la franquicia Star Wars en esta primera fase tras su compra a George Lucas a finales de 2012, es la de tener lista una película por año.
Se ha especulado mucho sobre qué personajes van a protagonizar estas producciones. Los que han sonado con más insistencia han sido Yoda (que sería la primera de ellas), Han Solo, en la que se hablaría de su pasado, y Boba Fett. En este último caso, algunos medios han comentado las fricciones en el seno de Lucasfilm. Disney querría convertir al cazarrecompensas de armadura mandaloriana en una especie de héroe (muy vendible a niveles de merchandising) mientras que el propio Lucas y las gentes encargadas de velar por el patrimonio de la saga, defienden al personaje preservando el misterio que le rodea, su oscuridad (desarrollada con acierto en The Clone Wars), precisamente lo que le hace atractivo, postura ésta con la que estoy de acuerdo.
No descartemos que alguna de esas películas esté protagonizada por alguno de los personajes aparecidos en Star Wars: Rebels (El Inquisidor, por ejemplo). Más pronto que tarde saldremos de dudas.
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